Al llegar se encontró con un pueblo desolado, pero vio una luz encendida en una taberna, tomó coraje y entró. Se sorprendió al ver como todos eran tan extraños, hombres con jorobas, mujeres con dos cabezas, chicos con un ojo, y todos se dieron vuelta a mirarlo, sus manos empezaron a transpirar y sólo se le ocurrió decir que él había vivido allí de chico y que estaba de paso, necesitando un plato caliente de comida y agua para él y su caballo.
De repente, escuchó una voz en la barra, era la de un hombre pero con imagen de mujer, Braulio se acercó y el cantinero le dijo que se ponga cómodo, él preguntó que había pasado en el pueblo ya que todo había cambiado al recordar su infancia allí. Entonces, mientras comía le empezaron a contar lo que había sucedido...
Una noche mientras todos dormían llegó el famoso malhechor Lorenzo con su madre
Braulio desesperado dijo que quería ayudarlos, entonces se juntaron en la mesa redonda e idearon un plan que les llevó toda la noche.
Al día siguiente llevaron a cabo su plan, logró entrar al castillo vestido de sirviente con la ayuda de la mucama del castillo, prepararon comida y le dijeron a un guardia que debían llevársela a los presos por orden de Lorenzo, los guardias acompañaron a Braulio hasta las celdas, allí vio al Rey , a la Reina y les dijo que tengan fe que él y su pueblo los sacarían de allí, y el Rey le dijo que se fijara si la Princesa estaba bien, Braulio preguntó donde estaba la princesa y al verla se enamoró de inmediato, y le dijo que la sacaría de allí.
Volvió a la cocina a buscar el veneno para matar a
El pueblo, corrió hacia el castillo, agarrando sus armas para ayudar a Braulio y liberar al Rey. Braulio buscó a Lorenzo y empezaron a luchar con sus espadas, el pueblo entró al castillo y pelearon con los guardias malos y otros liberaron a los guardias del Rey, Lorenzo llegó a escaparse en caballo, pero Braulio lo vio, corrió hacia él y afortunadamente Babasónico lo estaba esperando, juntos corrieron a derrotar a Lorenzo, lucharon cada uno desde su caballo, en el oscuro bosque, pero de repente Babasónico freno al ver la pendiente y el caballo de Lorenzo también, tirándolo al vacío, los cocodrilos hambrientos saltaron y lo devoraron.
Braulio y Babasónico regresaron al castillo y vieron cómo festejaba el pueblo que había quedado libre, el Rey lo llamó agradeciéndole su liberación y le preguntó que podía hacer por él, y Braulio le pidió la mano de Alma, quien aceptó gustosamente. Hicieron una gran fiesta de casamiento, ahora Braulio y Babasónico habían encontrado un nuevo hogar.
Todos fueron felices, inclusive Babasónico que se enamoró de Bella, la yegua de la Princesa.
Nadine Larrea
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